Gibraltar español, ¿oiga, y para qué?

No acabo de entender bien que gano o que pierdo si ese pedazo de roca tienen una bandera u otra en la punta, y la verdad es que la mayoría de la gente que conozco tampoco es que les quite mucho el sueño la titularidad del peñón. Quizás cuando hablas con la gente lo que si se nota es un cierto punto de envidia por la situación ventajosa de los llanitos, más en el estilo de ¡Yo también quiero ser gibraltareño! que en el ¡Gibraltar español!

Y es que muy tonto tiene que ser uno para no apreciar las enormes ventajas que te da el vivir en la última colonia de Europa. Vamos que si todas las colonias hubieran sido tratadas por su metrópolis como esta, seguramente la reina de Inglaterra todavía conservaría su imperio y en España seguiría sin ponerse el Sol. Por eso tampoco entiendo la estrategia de Moratinos de querer convencerlos a base de talante de que estarían mejor formando parte de la pátria común e indivisible de todos los españoles que siendo un paraíso fiscal ya que: ¿quien cambiaría un paraíso por España? aunque sólo sea un paraíso fiscal. Piensenló bien, ¿cambiarían su negocio de blanqueo de capitales por la franca mirada de Zapatero? O ¿dejaría usted su "gasolinera pirata" de barcos por una sonrisa cómplice de Moratinos? ¿Cambiaría su chollo de "ciudadano de un paraíso fiscal" para ser un simple currito en paro de la baía de Algeciras, una de las zonas más deprimidas de la UE?

Por eso a mi no me acaba de caber en la cabeza que una prioridad de la política exterior española sea la reivindicación histórica de un territorio que no ha sido español desde no se cuando. No entiendo como puede semejante cosa ser una prioridad en un país como este plagado de graves problemas reales, de hecho creo que ni siquiera debería de ser nuestra prioridad respecto a la roca, quizás deberíamos centrar nuestro esfuerzo en conseguir que deje de ser un paraíso fiscal para esos que se rasgan sus vestiduras hablando de la sagrada unidad de España pero que no tienen escrúpulos en evadir sus impuestos allí, o en que deje de ser un vertedero de sustancias toxicas que destruye la riqueza ecológica de la zona o que deje de ser atracadero y taller de submarinos nucleares. Quizás deberíamos dejarnos de chorradas patrioteras más propias de otros tiempos y buscar que Gibraltar deje de ser el vecino cafre de arriba que tira basura por el patio de luz y arma jaleo moviendo los muebles todas las noches. Y las gestas patrióticas las dejamos para la historia que es donde deben quedarse.